Con ella llegó el escándalo

Conmoción en la escena putarraco-payasil al filtrarse a los medios una grabación con cámara oculta que desvela que la mariscala de las putarracas, la célebre Antoinette, no se tiñe el pelo. La muy ordinaria es pelirroja natural, ya ven ustedes si será simple. Como es natural, todo el delicado equilibrio de alianzas de la escena palurdo-petarda-putarraco-payasa ha saltado por los aires, y las consecuencias son aún imprevisibles. Las llamadas a la calma de las autoridades tienen menos efecto que la ESO en Alcorcón, y las próximas horas pueden ser cruciales. Tal vez sea ésta la ocasión que la niña payasa lleva años esperando, incluso hay analistas (lamentables individuos que no han superado la fase anal) que afirman que su perversa mano está detrás de todo el asunto. A estas alturas nada nos sorprende de la niña del demonio, la verdad. Seguiremos informando.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
La ESO funciona de maravilla.
Lo acontecido en Alcorcón quizás se deba a un desencuentro entre petardos precisamente desbordados por las extrictas normas de la docencia hispana,