El mundo


La niña payasa se desmelena, no hay otra explicación. Después de una etapa pseudopoética de escaso gusto y lamentables resultados, la insólita niña ha decidido volver a sus cuadros, y empezar por lo más básico: ella misma. Su relación con el mundo es el tema de este cuadro, y en él la niña, ya sin rebozos, confiesa sus malévolas intenciones. Más le valdría a la comunidad internacional ponerse las pilas antes de que la niña petarda ésta consiga sus objetivos y esclavice al mundo para sus torticeros propósitos. La sangrienta revolución está en marcha, y es muy posible que la lista de sacrificables aumente considerablemente. La gente es desagradable, y la niña payasa no iba a ser menos.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Prongo una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la Unidad para tratar la amenaza de la Niña Payasa. Ella es el peligro, no Irán y su carrera atómica. He dicho.
Firmado: Cochemari.
Anónimo ha dicho que…
Aggg, el malvado blog ha modificado mi mensaje. Esto es culpa de Prisa, que seguro que es la dueña del web....
La niña payasa ha dicho que…
Seréis todos mis esclavos y os obligaré a cantar canciones de Pimpinela vestidos de Ágatha Ruiz de la Prada. Mi maldad no conoce límites.