Las giras de la niña payasa

La niña payasa ha vuelto de su gira triunfal por la Tasca Juanita, en la que varias veces al día ha redefinido el concepto de "ridículo". La niña, que cuando la ocasión lo requiere bebe más que Sue Ellen los viernes, ha ofendido de tantas formas a la razón y al buen gusto, que el único consuelo que nos queda es que, al menos, mientras esté haciendo el cateto por los más insalubres garitos, no estará planeando revoluciones ni diseñando cuadritos. Bienvenidos sean sus etílicos delirios si libran al mundo de la amenaza de la niña. ¿Hasta cuándo soportaremos sus despreciables devaneos? ¿Será demasiado tarde? ¿Acabaremos todos siendo sus esclavos? ¿Ya han pensado lo que van a ponerse?

Comentarios