La gran niña española


Los relatos veraniegos de La Niña Payasa - Hoy: Taumaturga de la Lalá

Taumaturga de la Lalá es una humilde bordadora en un taller de costura especializado en trajes de flamenca. Tiene unas manos prodigiosas, que ejecutan con la mayor sencillez los diseños más intrincados. No hay gradación de color que ella no consiga de modo admirable, y sus puntadas diminutas son legendarias entre las aficionadas a la alta costura de los faralaes. En el taller hay otra bordadora, que la detesta. Ella lleva formándose desde niña en las escuelas más exigentes de bordado, y le dedica a su arte interminables sesiones de perfeccionamiento, mientras que Taumaturga parece realizar las tareas más difíciles sin el menor esfuerzo, y con una precisión y un preciosismo que son la admiración de todo el mundo. La otra bordadora, que se llama Zangolotina Kumamoto Yeyé, creía haber llegado a la cima de su profesión cuando el taller contrató a Taumaturga, y de pronto los mejores clientes empezaron a abandonarla, seducidos por la magia que con el hilo era capaz de pintar la nueva muchacha. Zangolotina piensa que Dios, al que ella reza constantemente, la pone a prueba con esta nueva bordadora a la que parece haber colmado de todos los dones que a ella tan difíciles le fueron de adquirir. Y mientras Taumaturga ríe feliz mientras borda, Zangolotina rumia oscuras venganzas y sufre por el abandono de ese Dios al que siempre creyó misericordioso y al que ahora está empezando a considerar vengativo y cruel. Cada puntada se le clava en el corazón, cada elogio que recibe su rival es amarga hiel en sus labios resecos por la desesperación. Planea deshacerse de ella envenenando las agujas con las que borda, y que tiene la costumbre de sujetar entre los labios mientras corta los hilos, pero se equivoca en la fórmula y lo que hace es crear una forma de vida aterradora, un monstruo que crece y que la devora a ella antes de salir a la calle y organizar una escabechina de mucho cuidado. Pobre Zangolotina, devorada por sus propios celos y culpable de la mayor matanza que se ha dado jamás en Copenhague, que es donde está situado el taller. 

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